La actividad radiactiva es una medida de la cantidad de radiación ionizante que emite una muestra o fuente radioactiva en un determinado período de tiempo. Se refiere a la tasa de desintegración de los núcleos radiactivos presentes en la muestra.
La radiactividad es un fenómeno natural o inducido en el que los núcleos atómicos inestables se desintegran espontáneamente, emitiendo partículas subatómicas y radiación electromagnética. Estas desintegraciones pueden ser alfa (emisión de partículas alfa), beta (emisión de electrones o positrones) o gamma (emisión de fotones gamma).
La actividad radiactiva se mide en unidades llamadas becquerel (Bq) en el Sistema Internacional (SI). Un becquerel es equivalente a una desintegración por segundo. También se utiliza la unidad antigua de curie (Ci), donde 1 Ci es igual a 3.7 × 10^10 becquerel.
La actividad radiactiva de una muestra depende de la cantidad de núcleos radiactivos presentes y de la tasa de desintegración de esos núcleos. A medida que los núcleos radiactivos se desintegran, la actividad disminuye con el tiempo debido a la desaparición de los núcleos inestables.
La actividad radiactiva es un parámetro importante en la radioprotección, ya que permite evaluar los niveles de exposición a la radiación y tomar medidas de precaución adecuadas. También se utiliza en la medicina nuclear para determinar la dosis de radiación administrada a los pacientes en procedimientos diagnósticos y terapéuticos.
En resumen, la actividad radiactiva es una medida de la tasa de desintegración de los núcleos radiactivos presentes en una muestra o fuente. Se expresa en becquerel (Bq) o curie (Ci) y es fundamental en la evaluación de la exposición a la radiación y en la medicina nuclear.