Nikola Tesla
Si usted no recuerda el programa infantil Los Teletubbies, mucho mejor, ya que fue un programa creado por un grupo de imbéciles que, de acuerdo con algunas investigaciones, tenía como efecto el hipnotizar a nuestros niños para que actuasen como estúpidos. Pues bien, el otro día, mientras intentaba informarme sobre los resultados de la Champions League, buscando algún noticiero en los canales especializados en deportes, tuve la mala suerte de caer en el programa Pura Química, que no tiene nada que envidiar a Los Teletubbies, si la idea es hacer programas para personas con el coeficiente intelectual de Maradona.
La suerte es que tenía en mis manos el control remoto o, como lo llaman en casa, el cambia-cambia, así que solamente tuve que mover un dedo para salirme de ESPN preservando mi salud mental. Este genial invento, que nos permite hacer desaparecer de nuestra pantalla a los gauchos de Pura Química, así como también a algunos programas nacionales que fácilmente competirían en esta categoría de programas para tontos, se lo debemos a Nicola Tesla.
En un lluvioso día hace 117 años, en el Madison Square Garden de Nueva York, el gran científico e inventor Nikola Tesla presentaba un pequeño bote controlado a distancia al que llamó Teleautomaton. Fue la primera vez que se dio a conocer la posibilidad del control remoto, aunque lamentablemente el invento fue patentado por el español Leonardo Torres
Quevedo casi cinco años después. Ciertamente éste no fue el único invento que le fue robado a Tesla, uno de los casos más destacados es el invento de la radio. Si hoy preguntásemos quién fue su inventor, probablemente la respuesta sería Guglielmo Marconi, quien ganó el Premio Nobel gracias al invento de Tesla. De igual manera Thomas Alva Edison ha sido proclamado como el padre de la electricidad, sin embargo Edison no habría sido nada si Nicola Tesla no hubiese iluminado al mundo gracias al desarrollo de la corriente alterna.
El físico e inventor de origen serbio, quien posteriormente adoptaría la nacionalidad norteamericana, a pesar de sus múltiples inventos como la corriente alterna, el radar, la resonancia magnética, la bobina de Tesla, la transferencia inalámbrica de energía, el despegue y aterrizaje vertical de aviones, la radio, por citar algunos de ellos, es uno de los más grandes genios que la humanidad ha olvidado. Los aportes de Tesla al desarrollo de la ciencia, así como sus geniales inventos, lo colocan en la palestra de los más destacados genios, junto con Albert Einstein, Leonardo da Vinci e Isaac Newton.